El secretario xeral de Universidades, José Alberto Díez de Castro, anunció ayer que la Xunta pondrá sobre la mesa en febrero del próximo año la propuesta de implantación de la titulación de Medicina en la Universidad de La Coruña.
Durante una visita a la Facultad de Ciencias de la Educación, en el campus de Elviña, Díez de Castro admitió, tras la última polémica sobre esta carrera, que la Universidad de Santiago incumplió el protocolo a la hora de designar docentes sin tener en cuenta a las demás universidades. Como solución al problema, aportó, la Xunta ha convocado a una reunión a los tres rectores, fijada para el próximo 19 de octubre, con el objetivo de crear una comisión de seguimiento de este protocolo en la que también estén presentes miembros de las consellerías de Sanidade y Educación.
Consenso > El secretario xeral abogó por un nuevo mapa de titulaciones de Galicia en el que prime el acuerdo y el consenso entre las tres universidades y, en este sentido, defendió la creación de la titulación de Medicina en La Coruña con el objetivo de mejorar la calidad formativa del alumnado.
El anuncio se produce un día después de que el rector de la Universidad, José María Barja, reclamara a la Consellería de Sanidade que se respete el pacto de Medicina, un conflicto que se desató cuando la de Santiago convocó, de forma unilateral, una veintena de plazas para que médicos del complejo hospitalario coruñés impartieran, en el propio centro sanitario, docencia a alumnos de la facultad de Medicina.
El malestar creado en el seno de la institución educativa surge porque, según entiende Barja, con esta decisión se “ningunea” a la ciudad. Así, desde el rectorado consideran que es la consellería la que debe decidir sobre el asunto, ya que, en un plazo de dos meses, las plazas deberán quedar resueltas.
Asimismo, recuerda que el objetivo último de la entidad es formar a profesionales en esta carrera, “tanto nos hospitais como na Universidade”, explicó el máximo responsable de este órgano.
Medidas > La entidad coruñesa advirtió de que adoptará las medidas que considere “oportunas” para que se respeten los términos del convenio, que establece la figura del “colaborador docente”, que depende del Servicio Galego de Saúde (Sergas), y que “debe contar coa venia das tres universidades galegas”.
Por otra parte, Barja hace un llamamiento también a la Consellería de Educación y a los responsables de la Universidad de Santiago “para non desvirtuar un factor esencial para a continuidade dos estudios de Medicina na Coruña”.
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